Valorización

Aprovechamiento energético

El aprovechamiento térmico es la utilización de aquellos residuos sólidos con valor energético, en algún método de tratamiento, que a su vez permite la generación de calor, electricidad o gas.

Estos métodos de tratamiento incluyen la incineración, la gasificación y la pirólisis, los cuales varían en sus requerimientos operacionales y los subproductos obtenidos.

La incineración es el método de tratamiento más común, mientras que la gasificación y la pirólisis con residuos sólidos son procesos de vanguardia que aún se están desarrollando (Steinvorth, 2014).

Según Themelis y otros (2016), el aprovechamiento energético de residuos sólidos, lo que se conoce como waste-to-energy, es un proceso que permite desviar parte del flujo de residuos sólidos que van a los vertederos hacia procesos en los cuales se produce energía.

El waste-to-energy es una tecnología de tratamiento térmico con recuperación de energía, que se ha convertido en una de las opciones preferidas en la mayoría de los países de Europa, Japón, varias ciudades de los Estados Unidos y de manera creciente en China.

Sin embargo, la alta inversión y costos de operación de esta tecnología, sumado a la falta de información y comunicación con la población respecto a los impactos ambientales, ha provocado que esta tecnología haya tenido poca penetración en América Latina y el Caribe.

Para Themelis y otros (2016), el waste-to-energy puede ser una alternativa cuando los gobiernos nacionales sitúan la gestión sostenible de residuos sólidos en lo alto de su lista de prioridades, como el agua potable, la electricidad y la infraestructura de tratamiento de aguas residuales.

Para ello se debe considerar el impacto de corto y largo plazos, los costos financieros, la calidad y cantidad de los residuos sólidos para el funcionamiento continuo del proyecto, la condición de fuente de energía renovable, la menor tierra usada por menos disposición en vertederos, y los beneficios de gases de efecto invernadero y ambientales.

Cuando se consideran estos factores en comparación con otras alternativas de tratamiento y eliminación de residuos sólidos, el waste-to-energy es una opción que los gobiernos deben mantener en observación.

 

 

                        



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Compostaje

En la mayoría de los países, los residuos sólidos de origen orgánico son la mayor proporción de los residuos sólidos generados. El compostaje es un método de aprovechamiento y valoración de estos residuos orgánicos, que permite su reducción por medio de microorganismos fermentativos que permiten la descomposición de la materia orgánica.

De acuerdo con Borrero y Azofeifa (2018), el compostaje “es una práctica sencilla y de bajo costo, para el aprovechamiento y valoración de los residuos orgánicos, que permite la reducción y estandarización de dichos residuos”.

El compostaje puede hacerse con métodos sencillos por personas, familias, comunidades, instituciones y empresas. (Ver guía ofrecida por Borrero y Azofeifa, 2018).

De acuerdo con Garita y Rojas (2015), el compostaje se puede realizar con residuos sólidos que provienen de hogares, industrias, plantas de tratamiento, la agricultura, la horticultura y la silvicultura. Estos residuos son restos de comidas, excretas de animales y restos de jardines y de cultivos agrícolas. Los métodos a pequeña escala pueden ser con composteras giratorias o por ejemplo el Lombricompostaje.

Es muy importante que las municipalidades diseñen campañas de difusión de para incentivar el compostaje doméstico, ya que esto podría tener un alto impacto en la reducción de los residuos sólidos recolectados, transportados, tratados y puestos en los sitios de disposición. Se recomienda la guía de SEMARNAT en Garita y Rojas (2015).

Según Smith y Ali (2002), las lecciones aprendidas sobre los problemas de gestión de residuos sólidos en general requieren mejor tratamiento de los problemas asociados con la gestión de residuos orgánicos como los alimentos.

Para la FAO, los gobiernos locales deben incorporar procesos de promoción de compostaje mediante:

• Mayor participación del público y actores sociales en el desarrollo de soluciones locales.

• Mayor integración del sector informal dentro de los sistemas formales de gestión de residuos sólidos.

• Evitar soluciones importadas, costosas y de alta tecnología, con preferencia por enfoques más intensivos en mano de obra, utilizando tecnologías y mecanización de bajo nivel.

• Establecer flujos financieros sólidos para cubrir los costos del sistema de gestión de residuos sólidos.

• Énfasis en extender la cobertura de estos programas en las grandes áreas urbanas y con la población pobre.

 



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Reciclaje

El reciclaje se logra cuando se logra una trasformación de los residuos sólidos en materiales que son valorizables en el mercado, es decir, con usos comerciales. Los esquemas para el reciclaje pueden ser la separación desde las fuentes y una recolección y transporte selectivos, es decir, separados de los residuos sólidos orgánicos.

Otros esquemas se orientan a separar los residuos durante el proceso de transporte o especialmente en los sitios de disposición. Obviamente si la separación en la fuente fuera efectiva y se logra la recolección y transporte selectivos, el aprovechamiento de los materiales reciclables sería mayor.

El reciclaje se da cuando se logra que los residuos sólidos se convierten en materiales con potencial de ser usados en la fabricación de otros productos que pueden ser utilizados en el mercado.

Para tener mejores rendimientos económicos del reciclaje se recomienda las siguientes condiciones. Para ver más detalles en Salas (2017) y Rischmagui (2017).

I. Lograr que haya una separación de los residuos reciclables de los residuos orgánicos y otros que no se pueden aprovechar en el reciclaje. Los materiales reciclables incluyen papel, cartón, plástico PET, vidrio y metales.

En tanto sea posible, esta separación debe hacerse desde los hogares y lugares de trabajo, lo que se denomina separación en la fuente.

Algunos sistemas de recolección, transporte y disposición de residuos son los que incluyen el proceso de separación, incluso con la instalación de centros de transferencia en los sitios de disposición.

II. Coordinar el transporte y recolección de los residuos sólidos en conjunto con los demás RS en hogares, comercios e industrias evitando la necesidad de duplicar rutas.

III. Ofrece un sistema de recolección selectivo. Lo ideal es tener camiones dedicados a la recolección y transporte de materiales reciclables, sin embargo, en algunos casos se tiene práctica de usar un compartimiento en los camiones de residuos sólidos regulares donde se separa parcialmente algunos de los materiales, en el entendido que en el centro de disposición se termina de hacer la separación y recuperación de los residuos sólidos reciclables.

IV. Coordinar a nivel regional con otras municipalidades la venta de residuos sólidos reciclables, para generar un volumen de residuos más estables y de que pueda ser de mayor interés comercial por parte de la industria.

V. Incentivar la demanda de residuos reciclables con nuevos usos en programas con universidades y centros de investigación enfocados en temas de producción.

VI. Trabajar en conjunto con la industria, instituciones, centros de investigación y gestores de reciclaje para alcanzar tasas de reciclaje económicamente sustentables, en cuanto a oferta y demanda, así como procedimientos de recuperación que se adapten al mercado.

 

 

         


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Reutilización

La reutilización es la acción de darle un nuevo uso a los artículos antes de desecharlos, sea en su forma de utilización original o en usos diferentes para los que fueron diseñados, y aunque suene como una práctica lógica y sostenible, se requiere de actores sociales sensibilizados y educación de la forma correcta con que pueden introducir reuso a los productos y materiales.

Según Rischmagui (2017), muchos de los materiales que se consideran desechos realmente se pueden volver a usar o pueden sustituir otros objetos, de manera que se minimiza el uso de nuevos materiales. Incluso, la mayor parte de los objetos pueden tener más de una vida útil, sea reparandolos o utilizando.

Algunos ejemplos de cosas que se puede reutilizar son: carteras, tetra pack, bolsas plásticas, llantas usadas, canastas, envases plástico, latas, botellas y envases de vidrio, tapas de botellas, aceite de cocina, etc.

Los frascos y latas como residuos peligrosos (plaguicidas, anticorrosivos y otros) no deben ser reutilizados de ninguna forma, ni aprovecharse para la elaboración de manualidades.

Las recomendaciones para reutilizar las recomendaciones son:

• Comprar preferiblemente productos con envases retornables o reutilizables.

• Al comprar considerar siempre las potencialidades de reuso de envases y materiales residuales.

• Evitar la rotura de envases de vidrio, plástico o metal, porque impide su reutilización.

• Lavar los residuos antes de reutilizar.

• Ser creativo para ver la utilidad de los residuos sólidos.

 



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Criterios para la separación de los residuos sólidos

De acuerdo con Salas (2017), la pre clasificación y la separación de residuos sólidos son la primera etapa en la recuperación de residuos, y es necesario que los generadores de los residuos sepan cuál es el procedimiento de separación para facilitar la recuperación del residuo y lograr que el impacto ambiental sea el mínimo, y que además los residuos no pasen a ser simplemente desechos una vez que ya han cumplido su vida útil.

Es necesario generar procedimientos de uso de recipientes destinados exclusivamente para cada tipo de residuo sólido, basados en los colores estandarizados al respecto. Estos colores universalmente asignados son verde, azul, amarillo, gris, negro, rojo, café y marrón.

El esfuerzo de la municipalidad es guiar un proceso de adoptar la clasificación simple, difundirla y promoverla entre la comunidad, las empresas y el comercio, con campañas de sensibilización y educación siempre es necesario guiar a los ciudadanos del cantón para que sepan darle el uso correcto a cada uno de los contenedores.

Es importante evitar errores en la clasificación y separación, para no se mezclen los residuos sólidos valorizables o se contaminen con materiales peligrosos u orgánicos.

Relación entre el color de recipiente y tipo de residuo sólidos

El esquema de clasificación por colores es ofrecido por Salas, Fiorella (2017)

• Verde: residuos compostables de origen vegetal.

• Azul: envases de plástico y tetrapak, bolsas plásticas, PVC, plásticos de ingeniería y otros plásticos.

• Amarillo: envases de aluminio, latón y hojalata que excluye restos de papel aluminio usado en las cocinas.

• Gris: papel y cartón.

• Negro: todos los residuos no valorizables pero no peligrosos.

• Rojo: residuos con un manejo especial por ser de tipo infectocontagiosos.

• Café: envases y residuos de vidrio, con excepción de ventanas, celosías, cerámicas y espejos.

• Marrón: residuos de manejo especial por su composición, necesidades de transporte, condiciones de almacenaje, volumen de generación, formas de uso o valor de recuperación.

Estos criterios de separación por colores se ve en la siguiente figura. El orden en la colocación se hace de acuerdo con las flechas, las cuales son la posición de cada recipiente en el orden de izquierda a derecha.

 

Clasificación de recipientes para la recolección de residuos sólidos

Fuente: Tomado de Salas (2017) basado en las normas INTE12-01-08, 2011

 

 



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Prevención y reducción en la fuente generadora

De acuerdo con Salas (2017) la forma más eficaz para mejorar la gestión de los residuos sólidos es la prevención y la reducción desde las fuentes de generación, que son las personas, las organizaciones privadas y las instituciones públicas.

De esta manera se puede deducir que el éxito de la gestión de residuos sólidos no reside en la capacidad de captar más residuos a través de la recolección, transporte y disposición final, sino en su capacidad de crear estrategias que logren prevenir la generación o reducir la cantidad de residuos producidos.

Reducción en la fabricación

Se enfoca a trabajar con la industria para que diseñe y fabrique sus productos con la menor cantidad de materias primas y fomentar que las industrias usen la menor cantidad posible de material en empaque y embalaje.

Las líneas de trabajo serían:

• Reducción de volumen de residuos introduciendo registro y control del uso de las materias primas que usa.

• Diseño y producción de bienes ambientalmente amigables, mediante el diseño con menor uso de materiales, uso de materiales reciclados y procesos productivos más eficientes.

• Uso de tecnologías más eficientes para aprovechar los insumos al máximo, reduciendo los residuos generados.

Reducción en la fuente generadora

Es el trabajo con los hogares, las instituciones públicas y las organizaciones para que realicen sus compras con criterios ecológicos, y se orienten a la reutilización, reciclados y compostaje de residuos. Las líneas de trabajo son:

• Motivar e involucrar a los actores sociales en el papel de forma participativa y voluntaria.

• Crear normativas y reglamentos reguladores para industria, instituciones, organizaciones y hogares.

• Sensibilizar los actores sobre el correcto manejo a los residuos sólidos.

Además de Rischmagui (2017) otras recomendaciones para reducir la cantidad de residuos en la vivienda son:

• Evitar comprar artículos innecesarios y productos que tengan muchos envoltorios y envases desechables o no reutilizables.

• Limitar la compra de productos que contengan sustancias peligrosas o contaminantes, si son de uso indispensable.

• No comprar o limitar el uso de productos descartables (vasos, bolsas, platos, cubiertos, cucharas y otros).

• Para el traslado de los productos comprados, es recomendable rechazar las bolsas de plástico, es mejor usar canastas, cajas de cartón o bolsas de otro material como de tela.

• Evitar llevar a las viviendas objetos usados o deteriorados tales como llantas, baterías de carro, computadoras y otros aparatos electrónicos y electrodomésticos.

 

 

              



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Prevenir o reducir la generación

El primer esfuerzo de un sistema de manejo de residuos debe ser incidir en el comportamiento de los hogares y las empresas, para evitar o reducir la generación de los residuos.

La jerarquía de los residuos sólidos parte de la prevención en la producción de los residuos, cuando es posible consumir o producir sin generarlos, y cuando irremediablemente los procesos de consumo o producción no pueden evitar la producción de residuos, los esfuerzos deben dirigirse a minimizar esa generación.

Los esfuerzos de una municipalidad para incidir en la generación de residuos de hogares y empresas, para evitarlos o reducirlos, implica que son menores los esfuerzos que deba hacer en los procesos de recolección, transporte, tratamiento y disposición.

Una estrategia estará enfocada en instar a la industria a que diseñe y fabrique sus productos de tal forma que necesiten la menor cantidad de materias primas durante la elaboración de sus productos, y a usar la menor cantidad posible de material para aspectos como empaque y embalaje.

Otra estrategia es incentivar a los hogares, instituciones públicas y organizaciones a que realicen sus compras con criterios de mínimo uso de empaque y embalaje y reutilizar los productos como bolsas, botellas, etc. y a separar y preparar productos que pueden ser reciclados o puestos en la producción de compost.

En el link se puede observar más sobre prevención y reducción en la fuente generadora.

Los procesos de pre clasificación y separación de residuos son la primera etapa en la recuperación de los residuos sólidos.

Cada tipo de residuo se debe depositar en un tipo de recipiente destinado exclusivamente a contener residuos de similar naturaleza.

En el link se detallan los criterios para la separación de los residuos sólidos.



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